viernes, 2 de diciembre de 2016

EL ARCANGEL URIEL: 
LLAMEN A LOS ANGELES PARA ASISTIRLES
29 de Octubre de 1987


"YO SOY" conocido para muchos como el Espíritu de la Ministración, el Espíritu de la Gracia y de la Paz.
Yo invoco las Bendiciones de la Paz cuando digo: LA PAZ SEA CON USTEDES. Acepten, queridos seres, la plenitud de esta Bendición en sus conciencias. Déjenla fluir a través de cada fibra de su ser. Sepan que a medida que hacen así, están verdaderamente en la Presencia del Todopoderoso.
Me gustaría que CONOCIERAN y ACEPTARAN la Presencia de la Hueste Angélica, que sirve con los Arcángeles todo el tiempo. Ellos son sus verdaderos AMIGOS y quisiera que los CONOCIERAN.
Tengan en cuenta la importancia de la aplicación personal diariamente de la Ley de la Vida - no sólo de vez en cuando, sino diaria y rítmicamente.
Sostengan la Copa de su Conciencia En Alto y progresarán en su Sendero hacia la Liberación Eterna en la Luz. SOSTENGAN LA COPA DE SU CONCIENCIA EN ALTO.
Vengo a ustedes en esta hora porque escucho muchas llamadas desde los corazones de la humanidad por la Paz. Es el deseo más serio de la mayoría de la humanidad ahora. La Paz debe ser primero en la experien­cia individual. Los Ángeles están todos alrededor de ustedes para ayudarles como un individuo a experimentar la Paz en su corazón y en su mundo, y si sólo entonces esta Bendición fluiría a través de ustedes y en la Unidad de Toda Vida, todo su Universo sería Bendecido por eso.
Experimenten el sentimiento de Paz y llamen a los Ángeles para asistirles. Los Ángeles de la Ministración - y TODAS LAS VIRTUDES -esperan ansiosamente su llamada para expandir cualquier Virtud. Les aconsejo aceptar las Bendiciones que Ellos traen.
Con Amor les envuelvo en las Bendiciones de la Ministración, y sepan el verdadero significado del Amor Divino y sean un Curador de Toda Vida. Como el Maestro Jesús les instruyó hace muchas centurias -SEAN UN CURADOR DE TODOS LOS HOMBRES.
Espero su aceptación del Amor en el cual les envuelvo todo el
tiempo.
La Palabra, LAINEC, Diciembre 1987 Pág.13 -extractos-

jueves, 1 de diciembre de 2016

SHAMBALLA - FOCO DEL SEÑOR DEL MUNDO

El Puente, noviembre de 1957

          ¡Shamballa! ¡Cómo se agita el corazón con la mera mención de ese Nombre Sagrado! ¡Cuan nostálgico es el recuerdo (enterrado frecuentemente debajo de las presiones de la vida externa) de la paz y Luz de Shamballa, el Hogar Místico de la Gran Hermandad Blanca y, mientras estuvo sobre la Tierra, el hogar de morada del Amado Sanat Kumara, Nuestro “Señor del Mundo” durante tanto tiempo!

          ¡SHAMBALLA! ¡Una vez una idea, luego un Foco de Luz práctico y manifiesto! ¡Deseamos enfatizar el ESPIRITU de Shamballa el cual -al igual que el Espíritu de la Gran Hermandad Blanca- es servir alegremente a la vida aprisionada para liberarla eternamente!

          La Esencia Divina de Shamballa con la que fue dotada desde el principio por el amor de Sanat Kumara, ha sido grandemente incrementada a través de todas las edades. El hermoso Espíritu de Shamballa anima esta Esencia Divina y la protege, la dirige hacia fuera hacia y a través de todos los que entren a Shamballa, dándoles nueva vida y vitalidad espiritual para más servicio.

          Recientemente, Nuestro Amado Sanat Kumara fue liberado de Su exilio voluntario aquí y regresó a Su planeta, a Su Complemento Divino y a Su gente. A Shamballa vino el Señor Gautama para asumir las actividades de Sanat Kumara como el Nuevo Señor del Mundo. Sin embargo, muy frecuentemente este Gran Señor de Amor y Luz - Sanat Kumara - regresa a Shamballa para servicio a la Tierra por razón de su dulce amor.

          Hoy, la hermosa Shamballa existe únicamente en el Reino Etérico sobre la atmósfera de la Tierra.

          El Espíritu de Shamballa abre Sus Brazos a todos y espera la venida de aquellos que aman la vida lo suficiente como para desear ayudar a liberar a la Tierra y Su gente. ¿Qué les trae a ustedes a Shamballa en esta Época Santa? Sus esperanzas, de una certeza; sus oraciones; su cosecha del año. ¿Enriquecerán este Espíritu mediante su Presencia? ¡Mediten sobre Esto!


Revista La Palabra, LAINEC, Diciembre 1993 Pág.3 -extractos-