EL AMADO ARCANGEL MIGUEL

SERVIR AL TODOPODEROSO Y SOLO AL TODOPODEROSO

21 de Febrero de 1982

     ¿Desean ser miembros de Mis Legiones?, todo lo que se requiere es un deseo de corazón para hacer de este Planeta la perfección que la Tierra está destinada a ser. Entren diariamente dentro de la Llama de sus corazones, penetrando Mi radiación, sabiendo que tienen el poder dentro, y si desean servir conmigo, no de “esta” o “aquella forma” sino con la fuerza y el poder de Dios dentro, hagan un voto silente.

     Es posible, de otro modo no lo diría, que este mismo día pueda tomar lugar la más grande bendición que Yo haya enviado. No Inferiría que todo será perfección, pero las fuerzas negativas expresándose a través de todas las avenidas de imperfección en todo el Planeta, pueden ser "limitadas", por así decir, y ellas tendrán dificultades a medida que estemos presionándoles para que salgan del corral en el cual estén morando. Esta no es una actividad de crueldad —todos tienen libre albedrío— pero será un gran paso en su evolución hacia adelante. ¿No es eso un gran regalo desde lo Más Alto?

     Por favor no piensen que soy un Ser Quien uso Mis poderes y regalos sin que cada electrón sea investido en la sustancia del Amor Divino cuyo centro corazón es Luz Cristalina. Les amo más de lo que puedo expresar en palabras. Me siento como un Gran General que ha entrenado espléndidamente una armada —una Armada de Luz— quienes están dispuestos a tomar la disciplina requerida. Entiendan, digo 'disciplina' porque esa disciplina continuará en mayor y mayor capacidad hasta que esta Tierra sea un bello y puro globo incrementando la armonía de las esferas. Se les ha dicho, de seguro lo saben, que cada parte de la vida tiene un tono perfecto, y que ese tono perfecto expresándose a través de ustedes individualmente hará mucho para ayudar en esta tremenda actividad.

     No olviden que aquellos que están en cadenas, diré, no estarían en la existencia si no fueran también una parte del todo. Y precisamente como tienen grandes sinfonías en el Reino Elemental, es su deber obligado asistir a aquellos quienes realmente necesitan su ayuda. Les aconsejo —no morar en el servicio nefasto de ellas, sólo hagan una llamada como lo han hecho antes en el nombre de la Señora Astrea y Mi humilde Ser.

     Nuevamente les aconsejo emplear su Manto de Luz y mantener la armonía para que no haya la más leve abertura de entrada para ninguna fuerza negativa.

     Les dejo con el pensamiento de que experimentarán la más grande expansión de la conciencia si están determinados a servir al Todopoderoso, y sólo al Todopoderoso! La escogencia del libre albedrío es de ustedes. En lo que a la Poderosa Astrea y a Mí se refiere, les amaremos por toda la Eternidad.

Revista La Palabra, LAINEC, Junio 1982 Pág.11 -extractos-