EL AMADO KENICH AHAN
INTENSIFICANDO Y UTILIZANDO LAS VIRTUDES DIVINAS
El Puente,
diciembre 1967

El
hombre primitivo mismo dispuso sólo de una porción pequeña de las bendiciones y
poderes naturales que estaban presente en el universo en su época, pero el
hombre moderno, a través del conocimiento, ha aprovechado la energía hidráulica
y energía electrónica y ahora reconoce los beneficios potenciales para la
humanidad y la Tierra a través del control atómico, y es Nuestra invocación
constante que él, que también conoce los resultados desafortunados y terribles
que pueden ser infligidos sobre la humanidad por el mal uso de esta energía, no
desencadene la furia del elemento destructivo.
El
hombre puede decir que el sol y la lluvia son agentes impersonales de Dios que
“caen sobre el justo como el injusto por igual” y que las Bendiciones y
Radiación de Dios no pueden ser personalizadas, pero el pensamiento de un
momento revelará que aún el simple vidrio de aumento puede focalizar los Rayos
del Sol en cualquier punto, creando con eso llama.
¿No puede, entonces, el poder magnético del libre albedrío del hombre,
deseando unirse con la naturaleza y propósito de Todo-Bien intensificar y
utilizar cualquier radiación natural de una Virtud Divina? Muy ciertamente es
posible.
Revista La Palabra, LAINEC, Enero 2003 Pág.14 -extractos-