domingo, 14 de febrero de 2016

LA AMADA KWAN YIN

SOSTENIMIENTO DE LA PAZ

El Puente, junio 1971-9 de abril de 1971-


          En esta época del año muy triunfante, la más grande Festividad del Ciclo Anual un hombre humilde probó a los pueblos de este planeta que no existe la muerte, y que todos deberían esforzarse por la Victoria de la Luz sobre la manifestación humana. Sabemos que el Maestro Jesús ha sido llamado el Príncipe de lPaz, y El se daba cuenta que a través del sostenimiento de la Radiación de Paz Cósmica El podía lograr la Misión por la cual tomó la encarnación... y qué glorioso Ejemplo El fue de lealtad y amorosa obediencia a la Voluntad de Dios.

          Mientras la Tierra y todas Sus evoluciones está clamando por Paz, por la cesación de hostilidades de una naturaleza guerrera difundidas por todas partes sobre este planeta, todos deben llegar a conocer que la Virtud de la Paz es algo que ellos deben individualmente alcanzar para lograr el propósito de su encarnación sobre la Tierra. Humildemente les aconsejo recordar a ese glorioso Príncipe de la Paz, el Maestro Jesús, Quien tiene un extraordinario ímpetu de esta Virtud Divina que El desea tanto dar a todos, particularmente a ustedes quienes conocen de la actividad dadivosa de la Ley Espiritual–– que a medida que alguien da, más recibe para dispensar para el beneficio de los demás. Es sólo también que ustedes no ven con la vista interna la radiación discordante que está llenando al planeta y Su atmósfera, y les suplico disponer ustedes mismos de los Regalos que la Jerarquía Espiritual les ofrece para cambiar estas condiciones caóticas.

          Como eAmado Micah, eAngede lUnidad, a quien ustedes conocen como Jesús, está tratando de atraer toda Vida hacia dentro del Corazón de la Paz, para que el Plan Divino pueda llegar a la manifestación sobre esta Tierra. Cuando alguien sostiene la radiación de Armonía en su mundo, la Unidad con, o la mezcla de los vehículos inferiores con el Cristo dentro puede ser lograda. 

Revista La Palabra, LAINEC, Octubre 2004 Pàg.5

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