jueves, 9 de febrero de 2017

LA CURACION EN LA NUEVA DISPENSACION

El Puente, agosto 1952

         
       La conciencia de la humanidad está ahora en el umbral de una Nueva era, la cual requerirá de cada hombre que desarrolle dentro de sí mismo el conocimiento, capacidad y deseo de gobernar su destino, para disolver conscientemente las causas dentro de él mismo que están detrás de las experiencias desagradables en las cuales se encuentra y luego… inteligentemente… crear nuevos centros de pensamiento y sentimiento que se manifestarán en su cuerpo como juventud inmortal, fuerza y vigor inextinguible, y en su mente como paz, entendimiento e iluminación.

          El viejo orden, en donde el hombre dependía de una conciencia fuera de él mismo para aliviar su dolor, dispensar misericordia y hacerlo indemne, está llegando a su fin. El descubrimiento de los poderes que hay dentro de la propia vida del hombre forma el Campo de Exploración Espiritual abierto a los Pensadores y Líderes de la Raza.

          El hombre, captando su propio destino, debe reconocer el mismo, primero, la causa de su aflicción actual, y luego sin colocar ya más la responsabilidad de su infelicidad afuera de sí mismo, entrar a la Nueva Era de la maestría autoconsciente de su propia energía de vida y aprender a poner su casa en orden a través de las facultades y poderes que están latentes dentro de su propia vida.

          Jesús ha sido el Más Grande Ejemplo del Poder de Curación Instantánea que el Mundo Occidental haya conocido, Él ha dicho “las cosas que he hecho, ustedes harán también, y aún mayores cosas harán”. Su Promesa es nuestro Reto. No es suficiente tener unos pocos elegidos dotados con la capacidad de mitigar los males en la vida de las masas. Cada hombre, en este Mundo del Mañana, debe convertirse en la Presencia Curativa él mismo.

          La Curación de la Nueva Era llegará primero a través del ascenso de la gente hacia una explicación en cuanto a la causa de su aflicción.

          La música, color, vibraciones de Luz, todos son medios de curación, conductores naturales de fuerza vitalizadora y energizadora. El Reino Angélico, las Huestes Seráficas ciertos Maestros de Luz se unirán a la humanidad ayudando a liberar la raza de las condiciones aflictivas bajo las cuales funciona hoy.


Revista La Palabra, LAINEC, Octubre 1999 Pág.12

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