EL AMADO GRAN DIRECTOR DIVINO
El
Puente, agosto 1956
¡Salve! Amados amigos de la Luz y
Vida Eterna! Como saben, represento a la Séptima Raza Raíz. Como el Manú de esa
Raza Raíz (y de Sus sub-razas que se derivarán de ésta) en gran parte represento
el aspecto Padre para una raza que todavía no ha tenido oportunidad de encarnar
sobre la Tierra. (1).
Existen muy pocas corrientes de vida
viviendo sobre la Tierra hoy quienes están sosteniendo el Patrón perfecto de
su propia Divinidad. Hablo de esto con
respecto a Mi servicio específico a la vida, el cual es la introducción y
elevación a la perfección de la Séptima Raza Raíz. No importa cuan perfecto
pueda ser el Diseño Divino de una Raza Raíz, los 'heraldos' de esa Raza
comenzarán a entrar antes de que todas las previas Razas Raíces y Sus sub-razas
se hayan sucedido. No importa cuan exquisito, delicado y perfecto el Diseño de
un alma perteneciente a la nueva Raza, cada una de tales almas estará
sujeta (a través del poder del contagio) a los elementos de imperfección desde
las Razas que han salido antes; absorbiendo esa imperfección desde aquellos que
contacten diariamente o desde registros etéricos destructivos pasados que aún
irradien en la atmósfera de la Tierra. Por lo tanto, es muy Importante para Mí
asegurar los servicios de aquellos que Nos ayudarán a sostener el Concepto
Inmaculado para la Séptima Raza Raíz.
La Séptima Raza Raíz es muy hermosa.
Es una raza donde cada hombre es un Príncipe elegante y cada mujer es una
Reina; donde cada niño es un Querubín, un Ángel de pureza, paz o de alguna
cualidad-Divina en perfecto balance. ¡Esa es la era hacia la cual aspiramos!
Nuestra Tierra será una Estrella de
Liberación. Entonces los hombres serán Dioses encarnados. Es por esto que
espero y, también conmigo, están esperando todas estas hermosas corrientes de
vida a quienes la Ley Cósmica no puede permitirles encarnar sobre esta Tierra
en el presente.
Sur
América - Anfitriona de la Nueva Era
Ahora
bien, ustedes saben que la cuna de esta gran Civilización Nueva está en su
Hemisferio Occidental. Saben que el Continente Sur Americano y toda Latino
América (que conoció gran Luz antes) van a ser limpiados y purificados de todo
el letargo e indiferencia; de toda lujuria y pasión y de toda cosa que ha
exteriorizado esa gran jungla del Amazonas, teniéndola infestada de reptiles y
otras imperfecciones. Nuevamente, aparecerá sobre ese Continente de Sur
América una magnificente Era de Luz y belleza que será la estrella final en la
corona de Saint Germain.
Así
que en sus decretos esta noche, a medida que se visualicen comenzando en el
Cabo de Hornos, trabajando hacia arriba a través de nuestro Continente Sur
Americano, por favor sientan que el poder de Nuestra Luz invocado por sus
decretos está limpiándolo de todo lo que nunca debería haber sido, preparándolo
para la Edad Dorada. ¡La Luz que está apareciendo sobre ese Continente en el
futuro va a ser tan grande que la Luz de la civilización Inca (que fue
extraordinaria) será en comparación, como la Luz de un vela ante el Sol
físico!
Muchos
de ustedes vivieron en eras pasadas de gran Luz en Sur América y muchos de
ustedes recuerdan su adoración del Fuego y del Sol. Muchos de ustedes recuerdan
cuando el oro fluía libremente y decoraba los hogares así como usan pintura hoy
para el mismo propósito. ¡Esa belleza vendrá nuevamente! Créanme, la codicia y
adquisición de riqueza personal mediante métodos crueles habrá cesado de ser,
antes de que construyamos de nuevo. No más los hombres romperán las
representaciones doradas de los Templos de los Dioses; no más ellos asesinarán
a los gentiles Espíritus Guardianes. La Ley no permitirá la manifestación de
mayor perfección, belleza y riqueza hasta que aquellos aún capaces de tal
codicia y lujuria ya no habiten esta Tierra.
En Sur América, amados seres, ha habido gran Luz
y también gran oscuridad. Muchos sacrificios vivientes pasaron estridentemente
desde el cuerpo en los tan-llamados 'ritos religiosos'. A medida que hagan
demandas por la purificación de este Continente recuerden (así como las madres
preparan hermosas cunas de mimbres para sus niños) que cuando piensen en y
hagan demandas por Latino y Sur América, ustedes están preparándolas para una
Raza que va a venir - una Raza de belleza y perfección; una Raza que es la Mía.
¡Por su presencia aquí
hoy; por recordarme en sus decretos personales y por su amor a Saint Germain,
gracias!
El
Gran Director Divino
(l) Recuerde el querido lector que era el año de
1956 y todavía no había encamado ninguno de esa raza.
Fuente: Revista La Palabra,
INEC, Marzo 1993 Pág.10
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